El piridoxal-5-fosfato (PLP) es la forma activa de la vitamina B6, una vitamina soluble en agua que es necesaria para numerosas reacciones bioquímicas en el cuerpo. Es un nutriente esencial, lo que significa que el cuerpo no puede producirlo por sí solo y debe obtenerlo de alimentos o suplementos.
El PLP es una coenzima, lo que significa que es una molécula orgánica que ayuda a las enzimas a realizar sus funciones. El PLP participa en más de 150 reacciones enzimáticas, incluido el metabolismo de carbohidratos, proteínas y grasas. También participa en la síntesis de neurotransmisores, como la serotonina y la dopamina, y en la producción de glóbulos rojos.
El PLP se encuentra en una variedad de alimentos, incluidos pescado, aves, carne, patatas, plátanos y garbanzos. También está disponible como suplemento dietético, normalmente en forma de piridoxal-5-fosfato o como clorhidrato de piridoxina, que el cuerpo convierte en PLP.
El PLP también se conoce como fosfato de piridoxal, P-5-P y PL. Su nombre latino es piridoxal-5-fosforicum.
En términos de diferencias entre las diferentes versiones, el clorhidrato de piridoxina es la forma más comúnmente disponible de vitamina B6, pero el cuerpo debe convertirlo en PLP para que sea efectivo. El PLP es la forma activa de la vitamina B6, lo que significa que está fácilmente disponible para que el cuerpo la utilice.
El PLP tiene varios beneficios para la salud. Se ha demostrado que mejora los síntomas del síndrome premenstrual, reduce la inflamación, mejora el estado de ánimo y la función cognitiva y favorece la salud del corazón. Un estudio publicado en el Journal of Nutrition encontró que altas dosis de vitamina B6, incluido PLP, podrían reducir el riesgo de enfermedad cardíaca en las mujeres.
La dosis recomendada de PLP varía según la edad y el estado de salud del individuo. Los Institutos Nacionales de Salud recomiendan una ingesta diaria de 1.3 a 1.7 mg para adultos. Sin embargo, es posible que se necesiten dosis más altas para personas con determinadas afecciones médicas, como el síndrome premenstrual o la enfermedad cardiovascular. Siempre se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de tomar cualquier suplemento dietético, incluido el PLP.